Número 2
Existen una gran variedad de aceites esenciales y sus beneficios son muchos y muy variados. Hoy quiero hablarles del “Rey de los Aceites”: el incienso. Llamado Frankincense, el incienso proviene de la resina de la planta conocida como Boswellia Carterii, Frereana y Sacra. El aceite se obtiene mediante un proceso de destilación por arrastre de vapor.
El incienso y la resina del incienso se han utilizado desde la época de Babilionia y sabemos que fue uno de los regalos que ofrecieron los Tres Reyes Magos al Niño Jesús al nacer. Su uso desde la antigüedad ha ido desde la fabricación de perfumes hasta la preparación de pomadas para la piel.
Hoy en dia, el aceite de incienso se utiliza para potencializar las propiedades de otros aceites. Yo en lo personal, he utilizado este aceite para la desinflamación interna después de una operación. Tambien la he utilizado en la piel para promover la cicatrización tras una herida. Asimismo, el incienso promueve la sensación de bienestar, de paz y de relajación.
Es un aceite que puede ser utilizado en un difusor; puede ingerirse ya sea aplicando una gota abajo de la lengua, mediante el uso de una cápsula vegetal o diluyendolo en un vaso de vidrio con agua. También puede aplicarse en la piel combinándolo con aceite de coco fraccionado para minimizar el riesgo de sensibilidad en la piel.
Este aceite esencial ofrece los siguientes beneficios :
Alivia el estrés crónico y la ansiedad, disminuye el dolor y la inflamación, fortalice el sistema inmunológico y fuciona con antioxidante. También puede ser utilizado en la limpieza del hogar ya que es un gran antiséptico natural que ayuda a eliminar virus y bacterias al aplicarlo sobre superficies de tu hogar.
Cuando una persona pretenda utilizar un aceite esencial es muy importante consultar a un especialista en esta materia. No debe tomarse a la ligera ya que como he señalado, sus beneficios son diversos y maravillosos pero puede haber contraindicaciones para ciertas personas. Por ejemplo, puede ocasionar sensibilidad en la piel. Asimismo, hay que evitar el contacto con los ojos, oidos internos y zonas sensibles. Por ultimo, si estas embarazada, amamantando o bajo tratamiento o cuidado medico debes consultar a tu medico previamente.